After (Tarazona 0–Unionistas 0)

Los husos horarios y el que te tire Unionistas convierte a mi casa, demasiado a menudo, en un after. Ayer mi pareja dormía y yo, para hacer tiempo hasta mis tres de la madrugada, hora en que comenzaba el encuentro en Tarazona si resides en Bali, me puse a escuchar la rueda de prensa de Dani Ponz para luego meterme entre pecho y espalda la Alineación indebida de Carlos Matía. Que fue tanto el tiempo del que disponía que por él me enteré de que nuestro ex, Mikel Carro, pidió salir del Tarazona. Y buceando en internet, descubrí que ahora juega una división más abajo: en el Coruxo. Los gatos me miraban dubitativos. La época de lluvias atronaba en el exterior. El psicólogo más cercano distaba a medio kilómetro, pero éste sí que dormía. Y aún quedaba una hora para el comienzo. 

 

El partido fue insufrible. Tanto, que hasta pudimos haber ganado con el tiro en el área pequeña de Javi Villar cuando es posible que alguna de las dos manos del rival hubieran sido penalti. Y ese fue todo nuestro bagaje. Lo demás, la pena. Quedarse despierto hasta las cinco de la mañana –aquí amanece a las seis– para tragarse un empate a cero en Tarazona. Lo dicho, ni en Corea del Norte afean tanto el gesto a sus disidentes.

 

Como noticia positiva, baste recordar que ya son nueve encuentros sin perder y que como el Arenteiro cayó derrotado, estamos más cerca del puesto de Copa del Rey. Y claro, otra portería a cero. Otra. Lo cual no es poca broma. Por lo que podríamos decir que tras una semana extraña donde Ponz ha sido entrevistado catorce veces, nuestro entrenador, seguramente, no tuvo tanto tiempo para preparar el partido, del que sacamos un empate porque el rival es carne de Segunda Federación con aún menos gol que nosotros, lo cual ya es decir. 

 

Lo que queda claro es que la vida nos sigue poniendo oportunidades en el camino. Y que el próximo sábado y a la misma hora volverá a haber after en mi casa porque nos visita el Celta Fortuna, o lo que es lo mismo, un equipo de playoff con el que podríamos, esta vez sí, recortar de cuajo tres puntos, para saber si de verdad vamos a estar con posibilidades de meternos entre los cinco primeros o si lo nuestro será luchar por la última plaza de Copa del Rey. 

 

Y esta semana que mañana comienza déjense de efemérides. Que necesitamos a nuestro entrenador entregado a la táctica de cómo ganarle al filial del Celta.